A continuación os reproducimos el artículo y añadimos escaneado el mismo.
También puedes consultar el artículo del Heraldo del pasado 8/10/06 en nuestras noticias del 2006.
Heraldo de Aragón 14/2/2007
HÉROES DEL SILENCIO ACTUARÁ EL DÍA 12 DE OCTUBRE EN EL ESTADIO DE LA ROMAREDA
El grupo zaragozano volverá a reunirse en un escenario diez años después de que se rompiera. Además de Zaragoza, actuará en otras capitales latinoamericanas. El proceso de reunificación ha sido largo, desde que en 2005 se dieran los primeros pasos.
MATÍAS URIBÉ. Zaragoza | El rumoreado (y tan esperado) retorno de Héroes del Silencio se hará realidad completa el próximo otoño. Según ha podido saber este periódico, el grupo zaragozano tiene reservado el estadio de La Romareda para ofrecer un gran concierto el día 12 de octubre de este año en medio de un gran montaje escénico. Héroes romperán así su silencio de más de diez años desde que en 1996 decidieran darse un descanso temporal que después se convirtió en definitivo. Las tensas relaciones personales, el cansancio y la lesión de la mano izquierda del guitarrista Juan Valdivia, que se vio impedido para tocar algunas de las canciones del grupo, fueron el detonante que llevó a la ruptura.
La gestación de este retorno ha sido simple pero larga y laboriosa. Se inició a finales del año 2005, después de que Bunbury disolviera su banda El Huracán Ambulante y se retirara temporalmente de los escenarios. Pese a las discrepancias y a la actitud huidiza de Valdivia, siempre ha sido el cantante quien ha tenido la llave para volver a abrir la puerta de Héroes, no en vano el puesto de vocalista es prácticamente insustituible en un grupo, y más en su caso, con las peculiaridades de su voz y su presencia escénica, amén de una carrera en solitario muy solvente.
A finales de aquel año, con el apoyo de su mánager, Bunbury tomó la decisión de darle la vuelta de nuevo a esa llave y abrir el retorno del grupo. En principio, Valdivia no encajó bien la propuesta. Según él mismo reveló en una entrevista concedida a este periódico, con motivo de la presentación de su álbum "Trigonometralla" en la sala Oasis, su herida moral, por el maltrato recibido por sus compañeros durante la lesión de su mano, no había cicatrizado sino todo lo contrario, seguía supurando animadversión a cualquier propuesta de reencuentro. Pidió por escrito las condiciones de la vuelta y delegó en su mánager. Durante unos meses tanto este mánager y el de Bunbury se cartearon perfilando detalles hasta que junto al de los otros dos componentes, Joaquín Cardiel y Pedro Andreu, se acordó una reunión conjunta el pasado mes de julio.
La reunión de los cuatro músicos y los tres mánagers se celebró en medio de un ambiente muy cordial y con menos tensiones de las que cabía esperar. Los cuatro se mostraron muy satisfechos por el reencuentro. No se habló del pasado, o sea, no se lamieron heridas pasadas, sino que se habló del futuro y de proyectos, de una vuelta que muchos fans llevaban demandando insistentemente desde casi la misma disolución del grupo. Valdivia, con problemas todavía en la mano izquierda, pidió que su hermano Gonzalo, líder del Alquimista y artífice del asombroso espectáculo pinkfloydiano "The Wall" que ya ha paseado por buen número de capitales españolas, se incorporara al grupo para sentirse más arropado humanamente, familiarmente y técnicamente, a lo que los otros miembros, muy atinadamente, le dieron el visto bueno. De allí, a los ensayos, un paso. Se propusieron como "deberes" preparar once canciones y volver a tocarlas en un local, lo que ocurrió la primera semana de septiembre en el pabellón de fiestas de Osera, tal y como reveló este periódico.
Primeros ensayos.
El primer ensayo salió perfecto. Las once canciones sonaron con la rotundidad de los viejos tiempos, incluso en la batería, detrás de la cual se encontraba un debilitado Andreu, que estaba en fase de recuperación de una segunda operación. Las once canciones se repitieron varias veces más en medio de una gran derroche de ilusión por el retorno, que se mantenía por completo en secreto hasta que se perfilaran detalles de los conciertos y sobre todo que Juan cogiera confianza plena. En diciembre, el quinteto volvió a reunirse, en esta ocasión con quince canciones más, que de nuevo volvieron a sonar sin mácula. Fue la luz verde definitiva a un retorno que probablemente se haga oficial en breve.
Antes de reaparecer en Zaragoza, y tal y como ya adelantó este periódico en octubre, se tienen previstos varios conciertos más en Latinoamérica y Estados Unidos, en concreto en ciudades como México, Buenos Aires y Los Ángeles. Después de Zaragoza es posible que se añada alguna ciudad española más. Para poder llevar a cabo esta gira el grupo va a contar con el patrocinio de empresas públicas y privadas, entre ellas la Expo y el Ayuntamiento de Zaragoza.
Es seguramente la noticia musical más esperada del año, tal y como se desprende de los numerosos mensajes que afloran en los foros de internet. Miles de fans de todo el mundo llevan ansiando el retorno de estos grandes héroes musicales a los cuales no sólo no olvidaron nunca sino que encumbraron aún más durante sus largos diez años de silencio. Desde que la noticia saltó a la luz a través de HERALDO el pasado octubre en los mentados foros se palpa una ansiedad tremenda por el retorno, máxime desde que el mismo Bunbury afirmase días atrás en la web Bunburyclub.com que antes del 1 de febrero se pronunciaría en un sentido u otro sobre el retorno del grupo. Al cumplirse la fecha y no dar señales de vida, las expectativas crecieron más. Posiblemente a partir de ahora los nervios se tranquilizarán y más de uno podrá empezar a hacer números y preparar un generoso presupuesto porque muchos ya han anunciado que seguirán al completo la gira mundial. De ella, probablemente, saldrá un disco en directo y un DVD y quién sabe si la continuidad futura del grupo. El tiempo dirá.
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